sábado, diciembre 17, 2005
No sé por qué nos cuesta tanto decir las cosas a la cara de las personas. Muchos creen que uno de los factores críticos es nuestro background cultural. Mientras yo pienso que es simplemente una falta de respeto a uno mismo. Quizás sea una mezcla de timidez, que comprendo bastante bien, y lo otro debe ser la poca valentía, aquella que nos frena cuando algo nos parece mal.
Siempre nos vemos enfrentados a conocer a personas con múltiples características, y desgraciadamente no todos poseen la dosis precisa de empatía y precisión, para poder ser benevolente con la diferencia y así comunicar en ciertas instancias, algo que no les gusta. Me he percatado que tenemos un miedo huevón a sentarnos con la persona involucrada y hablar de manera civilizada sobre lo que nos molesta. Simplemente no podemos y nos avergonzamos. Lisa y llanamente es abrir el corazón y dialogar. De hecho es más sencillo de los que parece. Sólo que no nos atrevemos y morimos en el intento, cuando en la práctica resuelve muchos problemas de la vida cotidiana.
La mayoría de las personas no intentan expresar sus sentimientos por aquel orgullo enraizado en su personalidad. Entonces les grito: como mierda quieren ser escuchados y comprendidos. En vez, la acción es optar por tragarse la masa amarga de sus emociones y acumularlas peligrosamente esperando, que exploten y todo se vaya a la chucha: se destruyen relaciones y se hieren hasta decir basta.
Nombraré algunas de las cosas que aborrezco cuando tengo un amigo, amiga o pololo:
1. Que no sepa escuchar cuando estoy hablando algo serio (a modo de autocrítica, yo debo escuchar más).
2. Que no sea capaz de decirme NO.
3. Que no me mire a los ojos cuando me hable.
4. Que sea incapaz de solucionar un problema hablando directamente conmigo y en vez me deje notitas diciéndome, que no le gusta.
5. Que deba ser yo el que deba abrir sus emociones.
Así que, por favor personas traten de mover un poquito esa lengüita y expláyense con el prójimo, con sus amigos, con sus novios y novias. Por ejemplo me he dado cuenta que en época de elecciones nadie quiere decir por quien votará. Es como hacerse el Huevón y así evitar que el amigo derechista o piñerista no sepa que uno es de izquierda. O cuando estamos con los padres y se evitan temas contingentes como las drogas, la sexualidad, la vida en general.
Simplemente siento que cada vez hablamos menos frente a frente. Ya casi no dialogamos con otro ser humano, sino que lo hacemos a través de máquinas (teléfonos e Internet, específicamente), y nos hemos vuelto tan irreales, que para enamorarnos, divorciarnos, follar, hacer el amor, y otras tantas tareas; simplemente precisamos de una conexión a la web.
Yo con mi novio trato de hablar siempre. Lucho para que se comunique conmigo por sobre la media. Por eso en la noche lo invito a dar un paseo por el barrio Brasil y Yungay. En aquellas caminatas le saco con tirabuzón lo que piensa de mí. Así conozco en que me equivoco y le hago ver en qué erra él. Talvez quisiera que fuese más abierto conmigo, y aunque me enrostre, que esa es su forma de ser, yo sé que uno siempre puede agregarle un ingrediente nuevo a su esencia. Es cambiar, evolucionar y tratar de ser un poco más asequible para los demás, especialmente con aquello que vivimos – sea por cualquier circunstancia – y amamos.
Hablen, dialoguen, conversen, parlen, falen, talk, speak.
posted by Vicente Moran at 7:25 p. m.
At diciembre 19, 2005 12:57 a. m., Unknown
en realidad tienes toda la razón del mundo, dear
pero aunque el interior lo grite, hay cosas que uno no está preparada para decir, especialmente a determinadas personas, cuesta mucho
un abrazo
At diciembre 19, 2005 3:24 p. m., Unknown
hay veces que con la persona que tienes al frente no es posible el diálogo, aunque tu pongas de tu parte, aunque quieras lograr la empatía suprahumana, hay personas que simplemente no consiguen conversar sin explotar abruptamente en miles de moléculas de ira...
ultimamente, y a raíz de lo mismo, he decidido no molestar con mis palabras a quien no quiere oírlas... sólo dialogo con quien desea hacerlo, porque es un hecho que no todos somos iguales y a no todos le es fácil el poder sentarse abiertamente y conversar... ojála todos fuesemos así, el mundo sería enteramente más sincero, abierto, kizás mil y un veces mejor, casi el bilz y pap de los mundos...
osculos sr. sexy
At diciembre 19, 2005 7:29 p. m., Unknown
hola... qué tal?? creo que a mí, últimamente me pasa lo contrario a lo que posteas, me cuesta (sometimes) más decir lo que sí me gusta que lo que no.. es un rollo cu$%&!! pero intento superar mis trancas, ¿será eso normal, Dr. Morán??
Saludos,
os..
At diciembre 22, 2005 8:24 p. m., Calt
la comunicacion enriqueze a las personas de echo nos comunicamos siempre vivimos de ello, las maquinas son utiles para lograr ese objetivo y me parecen un gran herramienta comunicativa, solo q no permiten el contacto afectivo de dar la mano cuando piedes perdon o un beso cuando dices teamo, o algo tan simple como apretar las manos cuando decimos la verdad.
.-ABRAZOZ-.